El "liqui" subió 10% desde el acuerdo con bonistas y la brecha ya está en 78%

24-08-2020

Los analistas consultados sostienen que se necesitan tasas reales positivas y nuevos instrumentos, pero también piden cambios estructurales.

Los dólares financieros, es decir, aquellos que se obtienen a partir de operaciones de compraventa en los mercados bursátiles, volvieron a subir y a ampliar la brecha frente a las cotizaciones oficiales: el Contado con Liquidación (CCL) cerró la jornada con un avance de 1,8% para ubicarse en $131,40. El 4 de agosto, día en que Argentina anunció el acuerdo con los acreedores de bonos de ley extranjera, el CCL se ubicaba en $119,18, lo que implica un salto de más de $12 en tan sólo quince días. Actualmente la brecha con el mayorista, que ayer cerró en $73,48, es del 78,82%.

El MEP subió 1,5%, para colocarse en $127,61, mientras que el oficial minorista terminó el día igual que lo había empezado: en $77,50. Según fuentes de mercado, la intervención del Banco Central en el mercado de cambios durante el día fue neutra.

Una de las variables que vienen pidiendo muchos macroeconomistas es la suba de la tasa, de manera tal de remunerar de forma positiva el ahorro en pesos. Al respecto, Maximiliano Suárez, del Grupo Bull Market, afirmó: “Sobran pesos y una vez cubierta la cuota que dispone el BCRA para cada individuo o empresa el excedente se canaliza al mercado secundario de dólares. Las tasas en pesos tampoco ayudan mucho, porque si bien están cerca de empatarle a la inflación observada, algo que se venía reclamando hace rato, no tienen en cuenta el rol de las expectativas en las decisiones económicas. No alcanza con que la tasa empate con la inflación pasada, sino que se necesita que cubra la pérdida probable por una posible devaluación. Y la respuesta es que hoy ese nivel de tasa es incompatible con la recuperación y con el programa político del oficialismo”.El incremento de la brecha es una de las grandes preocupaciones del Gobierno, ya que genera expectativas de devaluación y lleva a los importadores a anticipar compras y a los exportadores a postergar ventas. Ahora bien, ¿qué margen de acción tienen las autoridades económicas y monetarias para bajar el CCL? La mayor parte de los consultados señalan que es reducido y que la solución debería pasar por un reacomodamiento estructural de la macroeconomía más que por medidas particulares sobre el sistema actual.

“No sé si en ese mercado puede influir mucho más. Toda restricción en los otros mercados de divisas trasladan presión a los demás canales alternativos”, consignó Gustavo Quintana, de PR Corredores de Cambio. Y añadió: “El arreglo con los acreedores es condición necesaria, pero no suficiente. Los problemas estructurales de la economía siguen sin resolverse y hay que añadir los derivados de la cuarentena”.

Por su parte, la economista Melisa Sala, de LCG, agregó: “El Gobierno podría apelar a intervenir a través de la venta de títulos (por ejemplo Anses) y puede ayudar eliminando o reduciendo el parking de cinco días. Pero en todos los casos refieren más parches sobre el esquema actual, que no parecen sostenibles en el tiempo”.

En tanto, un informe de la consultora ACM pronostica que es difícil que bajen las cotizaciones alternativas, debido a las expectativas de que el Central endurezca el torniquete sobre el dólar ahorro (aquel por el cual las personas pueden comprar u$s200 al mes): “Es posible que veamos ajustes en el mecanismo de dólar ahorro, ya que su dinámica parece ir en contra del objetivo del Gobierno de acumular reservas. En este escenario resulta difícil observar una caída sustantiva de los tipos de cambio alternativos, por el exceso de demanda en el mercado de cambios oficial, que indicaría inconvenientes para acumular reservas, lo cual, a su vez, gatillaría nuevas restricciones cambiarias, poniéndole un piso a las cotizaciones alternativas”, puntualiza el documento.

ACM añade: “El ritmo de devaluación del Central, que resulto mayor a la inflación en los últimos meses, podría resultar insuficiente para evitar una apreciación del tipo de cambio real si la inflación supera cómodamente el 3% en los próximos meses. Resulta clave entonces la decisión del Central sobre el ritmo de devaluación del dólar oficial y el nivel de tasas de interés en un contexto de mayor inflación, que promueva la esterilización del sobrante monetario una vez que la economía recupere dinamismo y modere las tensiones derivadas de la emisión monetaria producto de la pandemia”.

Algunos economistas creen que el CCL sí puede bajar después del canje con los bonistas, ya que atribuyen una parte de la suba a las operaciones de arbitraje de inversores que compran bonos en dólares para poder pasarse a títulos ajustados por CER. “Parte de la demanda viene por allí, ya que hay una fuerte demanda para entrar en la curva CER con este tipo de productos. Habrá que ver si después del canje empieza a descomprimir”, indicó Alejandro Caramella, jefe de Mesa en FIRST Capital Group.